Para
Rousseau, la educación tenía que salirse del modelo que estaba
implantado en la época (s.XVIII), que era puramente memorístico y
que se refleja en el refrán “la letra con sangre entra”. Por
ello dio unas pautas o un modelo nuevo de educación más difícil de
llevar a la práctica, pero más efectivo.
Rousseau
propuso una educación basada en los principios de no hacer mal a
nadie y de tolerancia, que uniéndose forman la educación
natural, que debe estar fundada en la
psicología del niño que debe ser conocida por el pedagogo, quien
tendrá que ser su guía y el impulsor de su desarrollo.
Esta
educación debe tratar de fomentar la espontaneidad del niño,
respetando siempre sus ideas (haciendo que no adopte las verdades de
los adultos de una manera irracional), y poniéndole además en
contacto con la naturaleza y la vida.
Estableció,
para llevar a cabo su propuesta de educación, cuatro ciclos
educativos que se adaptan a la edad de los niños:
- Hasta los cinco años, en el que se presta atención al cuerpo.
- De los cinco a los doce años, en el que se educan los sentidos.
- De los doce a los quince, el cerebro.
- De los quince a los veinte, se educa el corazón.
En mi
opinión, este sistema educativo que proponía Rousseau es muy
interesante, sobre todo en comparación con el memorístico, ya que
es muy diverso y completo (ejercita el cuerpo, los sentidos, el
cerebro y el corazón) y además al ser elaborativo y de comprensión
es un aprendizaje en el que la información se retiene más tiempo y
mejor.
Entonces, ¿por qué no
utilizarlo en la actualidad?. Pienso que quizás seguir el método de
Rousseau con todos los conocimientos que tenemos que abarcar, es
complicado, pero sí que se podrían hacer algunos cambios para
acercarse más a una educación como la de Rousseau y al aprendizaje
significativo de Ausubel y Piaget, que también se oponía al método
memorístico y establecía tres fases: asimilar, relacionar y
organizar la información.
Por ejemplo, creo que
para los niños de edades más tempranas, podían hacerse más
ejercicios que trabajasen el trabajo en equipo (que es aplicable a
todas las edades), como pequeñas obras de teatro, en las que se
trabajaría el cuerpo, el cerebro y los sentidos. Para cursos
posteriores, ver ejemplos prácticos y reales de lo que se está
estudiando, por ejemplo, si el temario trata de la prehistoria,
visitar un lugar donde haya restos arqueológicos o museos donde se
exponga lo estudiado, ya que en mi opinión muchas veces se estudian
cosas que nos parecen muy difíciles de alcanzar o constatar en un
sitio que no sea sobre el papel de nuestros libros.
Otro ejemplo es el de los
idiomas, que comenzamos a estudiar leyendo y hablando al mismo
tiempo, cuando los niños, al empezar a hablar de manera “natural”,
lo hacen escuchando y hablando la lengua nativa, es decir, no aprende
al mismo tiempo a leer, sino que primero escuchan, a continuación
reproducen, y años después es cuando se les enseña la lectura y
gramática de la lengua. Esto se comprueba en que hay muchas personas
que hablan y entienden una lengua extranjera perfectamente y sin
embargo no saben escribirla, eso demuestra que, aprender a hablar y
escribir en paralelo es un aprendizaje lento.
Por otro lado, está
claro que este método sería difícil de llevar a cabo hoy en día
(exceptuando quizás el ejemplo de los idiomas), pero pienso que con
pequeños cambios se puede lograr uno más grande y mejor para la
educación y el aprendizaje de los niños, haciendo de este un
“juego” y dando siempre una visión positiva de aprender nuevas
cosas, aumentando el gusto por aprender.
Fuentes utilizadas:
Libro Historia de la filosofía y
de la ciencia 2º Bachillerato, Editorial Laberinto.
Alguien a quien le
gustaría poder llevar a cabo estos
cambios.
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